Ni me mires

Siempre que se acaba una etapa, por el motivo que sea, saco a relucir mi peor caracter, y me doy cuenta de que tal y como conté una vez en uno de esos test, todo me parece mal y me vuelvo insoportable.
Y esque odio la gente infantil, la gente cantosa y demasiado extrovertida, la gente que quiere crear tendencia, las mujeres que andan con tacones en la biblioteca, los que llaman "viejos" a sus padres, la peliculas de Woophy Goldberg, los niños desagradecidos y a sus maleducadores, a Jaime Peñafiel, todo lo relacionado con la programacion, las feministas despechadas que rozan lo absurdo. También a la la gente que tiene dinero como para quitar el hambre a un continente y no hacen nada, las galas de mises, los examenes, la gente radical política, los políticos que incitan a ser radical, los emails en cadena, los anuncios de bajos creditos, la gente que dice que debate es discursión, a Carlos Sobera, a las ciudades españolas que te tratan como a un extrangero...vease Salou, Ibiza, Benidorm...a la gente que va en autobus el lunes a las seis hablando de su fin de semana, los viejos y viejas que escupen por la calle diez minutos despues de haber tosido...ah y aquello de que me digan cuando me desahogo: "ya te estas haciendo la victima".


5 comentarios:

Para, creo que voy a vomitar dijo...

Lo de los viejos escupiendo es superior a mis fuerzas!!!, sobre todo si son de esos que salen de dentro! Aggg!

Siempre que acaba una etapa empieza otra..., ahí muestras tu mejor caracter?

Un saludo y gracias por pasarte por mi rincón :)

Anónimo dijo...

Queda pendiente sumar a la lista a Sanchez Dragó

santamaria dijo...

Jaja...eso espero.Sanchez Dragó?bueno...al menos a ese le dan horarios nocturnos...

creo que a la lista habría que añadir algun que otro yankie.

Saludos!

Goldfinger dijo...

Acabo de dar con tu blog, enlazando, y que cosas tiene la vida, he decidido quedarme.

Urte Berri On

. dijo...

Sientete afortunado si solo sufres esas tensiones internas cuando estas acabando un ciclo.
Algunos (la presente) parece vivir en esa incómoda constante...
Me gusto tu desahogo y entiendo que victima es el que nos aguanta ;)
También somos victimas de nosotros mismos.
Un saludo